La herencia en España puede ser un proceso complicado, lleno de matices legales que pueden llevar a errores costosos y conflictos familiares. Si estás manejando tu propia sucesión o la de un ser querido, es esencial conocer los errores más comunes que se pueden evitar. A continuación, abordamos cinco de los errores más frecuentes en materia de herencias en España y cómo puedes prevenirlos.
No tener un testamento español para los activos en España
El error: Muchos expatriados suponen que su testamento extranjero cubre todos sus bienes, lo que puede llevar a complicaciones innecesarias.
Por qué es un problema: Sin un testamento español, tus herederos podrían enfrentar un proceso largo y costoso para transferir propiedades o cuentas bancarias en España. Esto puede requerir la traducción y legalización de documentos extranjeros, además de lidiar con la legislación sucesoria española si el testamento extranjero no es aceptado.
Cómo evitarlo: Es recomendable hacer un testamento español específicamente para los activos que posees en el país. Este proceso es generalmente sencillo y económico. Asegúrate de que no anule accidentalmente tu testamento principal extranjero, limitando su alcance únicamente a tus bienes en España. Al hacerlo, facilitas considerablemente el proceso de herencia para tus seres queridos.
Ignorar las reglas de herencia forzada en España
El error: Muchos creen que pueden distribuir su patrimonio a su antojo, sin tener en cuenta las reglas de herencia forzada que obligan a dejar un porcentaje a los hijos o padres.
Por qué es un problema: Si redactas un testamento que deja todo a tu cónyuge, pero la legislación española se aplica y tienes hijos, ellos podrían reclamar su porción legal, lo que podría desmantelar tus planes y generar conflictos familiares.
Cómo evitarlo: Es fundamental entender y planificar en torno a las normas de herencia forzada. Si eres español o un extranjero que no puede optar por no aplicar estas normas, asegúrate de que tu testamento respete dichas proporciones. Si eres expatriado, puedes utilizar el Reglamento Europeo 650/2012 para elegir la ley nacional que deseas aplicar a tu testamento, lo que podría permitirte eludir las normas de herencia forzada si tu legislación nacional lo permite.
Perder el plazo de 6 meses para el impuesto de sucesiones
El error: No liquidar el impuesto de sucesiones (Impuesto de Sucesiones) dentro de los seis meses posteriores al fallecimiento, a menudo debido a la falta de preparación de la documentación necesaria.
Por qué es un problema: Después de seis meses, comenzarán a acumularse intereses y sanciones sobre cualquier impuesto pendiente. Muchos herederos no se dan cuenta de que el tiempo corre, independientemente de si la herencia está completamente resuelta, lo que puede llevar a gastos innecesarios.
Cómo evitarlo: Es vital marcar la fecha límite de seis meses y presentar la declaración del impuesto de sucesiones a tiempo. España permite una extensión de seis meses si se solicita dentro de los primeros cinco meses. Aunque no tengas la herencia completamente administrada, puedes presentar una autoevaluación provisional y pagar un monto estimado para evitar sanciones.
No documentar y localizar todos los activos
El error: Los herederos a menudo no conocen todos los activos que poseía el fallecido, o el fallecido no dejó registros claros sobre sus bienes.
Por qué es un problema: Sin un conocimiento claro de todos los activos, algunos pueden quedar sin reclamar, y pueden resultar en deudas no pagadas que los herederos no conocían. Además, si hay un testamento español que los herederos no conocen, podrían distribuir la herencia incorrectamente.
Cómo evitarlo: Si estás planificando tu herencia, crea una lista completa de tus activos, incluyendo números de cuenta y direcciones de propiedades, y guárdala junto a tu testamento. Si eres un heredero, obtén el Certificado de Últimas Voluntades para verificar si existe un testamento español y consulta registros de seguros para identificar cualquier póliza de seguro que pueda existir.
No planificar adecuadamente el impuesto de sucesiones y las variaciones regionales
El error: Tratar el impuesto de sucesiones como algo uniforme o no planificarlo en absoluto.
Por qué es un problema: Esto puede llevar a pagar más impuestos de los necesarios o a complicaciones innecesarias para evitar un impuesto que podría ser menor o nulo. Por ejemplo, en Andalucía, los hijos y cónyuges pueden no pagar nada en herencias de gran valor.
Cómo evitarlo: Realiza una planificación adecuada del impuesto de sucesiones. Consulta con un asesor fiscal sobre tu situación específica, y asegúrate de conocer las reglas regionales que pueden ofrecer beneficios fiscales. Por ejemplo, en la región de Valencia, cada hijo puede tener una reducción significativa en el impuesto.
- No tener un testamento español.
- Ignorar las reglas de herencia forzada.
- Perder el plazo de seis meses para el impuesto de sucesiones.
- No documentar y localizar todos los activos.
- No planificar el impuesto de sucesiones adecuadamente.
Abordar proactivamente cada uno de estos errores – estableciendo testamentos adecuados, haciendo las elecciones legales correctas, marcando plazos, organizando la información de tu patrimonio y planificando los impuestos – puede ahorrarte a ti y a tu familia muchos problemas evitables. En cuestiones de herencia, un poco de prevención puede marcar la diferencia entre un proceso fluido y uno lleno de complicaciones. Al evitar estos errores, podrás asegurar que el proceso de herencia en España honre tus deseos y proteja los intereses de tus herederos.